La canción del Trueno de la Verdad
Reconexión con nuestro modelo original
Nos hemos desviado de ese debido al encantamiento inconsciente en el mundo atractivo de la materia que tiene un lado doloroso que tratamos de evitar enfrentar de muchas maneras. Quien ha comenzado a “cansarse” del ciclo interminable de la sucesión de experiencias placenteras y desagradables resultantes de la fricción con la materia, comienza naturalmente el curso de volver al estado original, la pureza primordial antes de partir de ella. Esto no tiene nada que ver con la percepción mental. Es un proceso profundo de nuestra psique superconsciente que sucede espontáneamente dependiendo de nuestras experiencias y realizaciones. Por lo tanto, no puede ser “provocado” por visualización, oraciones y ceremonias, con “actos sagrados” de cuerpo, palabra y mente, usando símbolos y con intención humana. No hay un “me convertiré”. O lo eres o no lo eres. O entiendes o no entiendes. Todo está sucediendo ahora. Se trata simplemente de permanecer en el estado natural del ser. “Apegarse” a cualquier “entendimiento” de la conciencia superior es una emanación etérea innecesaria de nuestra percepción mental que contiene elementos egoicos sutiles. Una forma inteligente de evitar simplemente “Ser” por “existir”.
Sigue una presentación de experiencias internas, expresadas en poesía “crepuscular”, poesía que une lo conocido y lo desconocido, poesía de la Verdad más allá del espacio y el tiempo, más allá del intelecto y el filosofar. El significado no se “capta” sino que se siente intuitivamente. Sólo así puede “suceder”, simple y reveladoramente a su naturaleza verdadera.
Abre tus oídos internos y escucha la voz que no usa palabras.
La canción del Trueno de la Verdad
Permanesca en tu estado natural que nunca ha nacido, libre,
dominando las alturas del cielo,
en tu Espíritu inconmensurable,
en la naturaleza de la ecuanimidad.
Percibe todo lo que aparesca como el juego de la gran sabiduría primordial,
de Gran Bienaventuranza espontáneamente lograda,
libre de extremos, restricciones y obstáculos.
Canta con alegría de ecuanimidad y no separación,
Bienaventuranza-Vacío infinito,
unión de los fenómenos y la ausencia de fenómenos.
Sumérgete en el juego de la igualdad absoluta,
en el placer supremo de la Unión extática
inconcebible auto-luminosidad Sabiduría Primordial.
Experimenta la existencia ilusoria como si fuera primordialmente pura,
naturaleza inmutable e intrincada, sin acción,
la gema de la esfera pura e infinita,
la aparición de la forma simbólica de Gran Compasión.
Reconosca su naturaleza originalmente pura, más allá del intelecto,
como la gran Sabiduría primordial, realizada naturalmente y espontáneamente.
En el espacio infinito del firmamento-inalterable e inmutable Esfera de la Verdad,
Aparecen gotas de lluvia, todos los fenómenos como una proyección mágica,
adornos de la sabiduría primordial
y las Nubes: la misericordia de la Gran Bienaventuranza sin obstáculos.
Los Rayos de Sol: impregnan todo y purifican el apego a las ondas discursivas.
Cuando suene el eco del Trueno melódico de la gran bienaventuranza
todos los obstáculos desaparecen en la Esfera No Nacida.
En una infinidad de rayos deslumbrantes del arco iris
todos los aglomerados, los campos de los sentidos y sus objetos
(los que capturan los sentidos),
desde el principio, brillan como perfectamente puros,
No nacidos, auto-aparentes, Primordiales,
Absolutamente completos e integrales, realizados espontáneamente.
Aquí, en el palacio inmaculado de la Gran Bienaventuranza
en la ciudad, inconcebiblemente secreta, multidimensional,
la base inimaginable de todo,
domina la Conciencia Natural, el Rey auto-radiante
y la Reina primordialmente no nacida.
En la última dicha de su no separabilidad,
la realización de la no dualidad,
el vínculo sagrado se cumple.
Poseen el tesoro de cualidades extraordinarias,
más allá de limitaciones y extremos.
Canciones melódicas y ondas de baile extáticas
llenan el espacio infinito del palacio,
celebran en Gran Felicidad,
celebran la realización de la danza visionaria del método hábil de la Compasión,
destilan la sustancia pura de los cinco elementos
del universo “exterior”,
restauran la fuerza vital, Esencia y Aliento de todos los seres
– los contenidos “internos” (del universo),
obteniendo así el conocimiento, la fuerza y la compasión de todos los Victoriosos.
Libre de cambio, mutación o disolución,
se convierten en joyas de Néctar de la Inmortalidad,
arco iris onírico que emerge en el Firmamento no nacido.
Todos los fenómenos, sonidos y pensamientos,
son la apariencia majestuosa sin obstrucciones de la Sabiduría Primordial.
Rey y Reina.
Eres mi último refugio.
mi “tal es”, naturaleza original indestructible,
Esfera de la Gran Quintaesencia de la Luz Pura,
inmutable, divinidad innata, Arcoiris deslumbrante.
Los cuerpos ilusorios de mí y de los otros,
son los cuerpos de tu noble entidad.
Todos los sonidos son la melodía de Tu Palabra.
Los recuerdos y las formas de pensamiento son las ondas de tu gran Conciencia Innata.
Hacia ti, hago la última ofrenda de sustancias internas y externas no egoicas,
un océano de néctar inagotable,
que irradia y penetra los límites del espacio,
resultante del estado de la ecuanimidad no dual.
Dedico todas las virtudes acumuladas en los tres tiempos,
en la vasta esfera de la Verdad Inconcebible,
el reino de la Pureza Primordial.
A través de la percepción pura, la no dualidad se realiza.
el apego al ego es superado milagrosamente
y madura naturalmente el cuerpo brillante de la Luz del Arco Iris.
El Espíritu se concibe como inmortal y auto-originado,
descansando naturalmente en la esfera inconcebible.
Así se establece la intención de la Iluminación.
Quien se adhiere a la dualidad de una “entidad” superior
como separada de uno mismo,
recibiendo bendiciones y orando con devoción,
sin darse cuenta de la unión que existe entre ellos
desde tiempos inmemoriales,
vagará interminablemente dentro del ciclo de la existencia.
Que los conceptos dualistas que separan al creyente
del objeto de su adoración,
sean aniquilados en la Esfera no nacida.
Que aparezcan las nubes de numerosas acciones compasivas.
Que la buena suerte de la Gran Bienaventuranza prevalezca.
Que los seres que se aferran a las cosas como realmente existentes
y ven las formas a través del filtro de la dualidad discursiva,
se despiertan de sus proyecciones confusas.
Que las ilusiones en conflicto,
fuerzas negativas de ignorancia y nociones dualistas,
sean purificadas en el reino de la Verdad espléndida.
Que la llama de la Sabiduría trascendental acabe con la creencia de
que todo tiene una existencia real inherente.
Que los brillantes y relucientes rayos de Luz llenen el espacio,
purificando sin excepción alguna todo lo que se adhiere a las proyecciones ilusorias y que todos los logros espirituales fluyen de acuerdo con el deseo de cada uno.